Visita a la Cueva Turística de S’Aigua, en Menorca, última incorporación en ACTE
La pasada semana, visitamos la Cova de S’Aigua, en Cala Blanca (Menorca). Se trata de la última incorporación a la Asociación de Cuevas Turísticas Españolas y que encierra un sinfín de restos arqueológicos que os contamos en este post.
El pasado sábado, 14 de agosto, visitamos la Cova de S’Aigua, en Cala Blanca, en la isla de Menorca. Se trata de la última incorporación en la Asociación de Cuevas Turísticas Españolas, de la que os contaremos más en las próximas semanas.
Dado que Menorca es un destino turístico bastante frecuentado, se recomienda adquirir las entradas con anterioridad y así asegurarnos una plaza en la visita, que en este caso, fue llevada a cabo por el guía Javier.
“Las primeras noticias publicadas que encontramos sobre la cueva datan de 1756, cuando Armstrong escribe sobre sus formaciones. También el Archiduque Salvador de Austria, en su obra Die Balearen (1897), hace referencia a esta cueva”.
A lo largo de los siglos y desde la prehistoria, la cueva ha sido utilizada para diferentes actividades. En primer lugar, como espacio de enterramiento. En segundo, “en la parte terrestre, se han documentado restos arqueológicos que podrían relacionarse con otras frecuentaciones vinculadas con la naveta de habitación de Cala Blanca”, donde se encuentra la cueva.
Además de los restos humanos, que se pueden apreciar a simple vista por los turistas (siempre protegidos), se encuentran piezas de cerámica romana, islámica y medieval cristiana.
Para terminar, los visitantes pueden acercarse a las inscripciones realizadas, en diferentes periodos de la época moderna, sobre la roca, fruto de la visita de españoles e ingleses en el periodo durante y posterior de la dominación inglesa en la isla.
Formaciones naturales
En cuanto a la composición de la cueva, más allá de la interrelación del ser humano con el espacio, nos encontramos una cueva creada a partir de la “filtración, durante miles de años, de agua de lluvia que se acumula y circula por la parte inferior de las diaclasas. Esta circulación es la que provoca la disolución de la roca y la formación de cavidades”.
Actualmente, la roca sigue viva, pudiendo apreciar, por un lado, las raíces de los pinos del exterior, que ayudan a la formación de figuras imposibles, y por otro, el continuo crecimiento de estalagmitas y estalactitas en el interior.
La visita a la cueva termina con una panorámica del lago subterráneo, que alberga numerosos restos arqueológicos y que permite al visitante ser conocedor de la cueva de S’Aigua en todo su esplendor.
Os dejamos el link directo a la compra de entradas.
Consejos previos a la visita
Como en el resto de la red de Cuevas Turísticas Españolas, recomendamos a nuestros visitantes reservar previamente la visita y acudir con al menos 15 minutos de antelación al punto de encuentro.
Si bien viene especificado en las instrucciones previas, se recomienda vestir ropa cómoda, preferiblemente de manga larga, así como calzado con suela rugosa, a prueba de resbalones. Todos nuestros espacios son seguros, si bien hay que tener en cuenta que se trata de áreas naturales.
Además, la Asociación de Cuevas Turísticas Españolas continúa cumpliendo los estrictos protocolos anti COVID determinados por las autoridades sanitarias competentes. De esta manera, se salvaguarda la integridad de todos nuestros visitantes con aforos reducidos, con el uso obligatorio de mascarilla y con el lavado de manos con gel hidroalcohólico.
